Ayer estuve en San Sebastián, en el Seminario Internacional del Consejo de Europa Creatividad e Innovación: retos de futuro. Lo organizaba la OAPEE, Organismo Autónomo de Programas Educativos Europeos del Ministerio de Educación. Participé en una mesa redonda sobre Educación e Innovación, presentando la metodología de aprendizaje-servicio.
El dinamismo de los participantes (y a lo mejor la primavera espectacular de la ciudad) me hizo pensar en una de las antinomias más interesantes relativas a la innovación: la tensión entre explotar y explorar, una dicotomía que descubrí hace un tiempo a través de Alfons Cornella y su portal Infonomía.
Explotar se refiere a sacar el jugo a lo conocido, mientras que explorar se refiere a atreverse con lo desconocido. Creo que en educación es necesario un cóctel sabio y equilibrado de los dos elementos. Cualquier obcecación en uno solo de ellos es prepotencia: la del educador que se resiste ferozmente a cualquier cosa que no conoce o la del educador que desprecia olímpicamente cualquier cosa que funcionó en el pasado.