Estoy en Lanzarote, en las III Jornadas del Proyecto Atlántida. He tenido la suerte de poder visitar el proyecto de la cochinilla en el pueblo de Mala, del cual había estado recogiendo información, leído noticias, Florencio Luengo me había hablado… La cochinilla es un insecto que parasita la chumbera o tunera, como se ve en la foto. De él se extrae un tinte natural.
Es una experiencia de aprendizaje-servicio desarrollada y consolidada desde hace años sin haber sido reconocida con este nombre. ¡Como tantas otras! Lo singular del proyecto de la recuperación de la cochinilla es el impacto socioeconómico que está teniendo en la población.
Parece mentira hasta qué punto pueden ser poderosas las actividades escolares que se plantean incidir en la comunidad y mejorarla. Sin embargo, cuando una conoce a Chana, la directora de la escuela ahora jubilada, se entiende enseguida: un todo terreno con un motor de optimismo y perseverancia a partes iguales.